martes, 11 de junio de 2019

El glaciar del Ródano

Esta entrada complementa otra anterior en la que os hablé de una excursión en automóvil por algunos puertos de montaña puertos suizos. Uno de ellos, el famoso, Furkapass es la antesala del glaciar del Ródano.




La mayoría de los glaciares que vemos hoy en los Alpes se encuentran a más de 3.000 metros de altitud. Solo los más grandes pueden sobrevivir bajo ese límite que va subiendo conforme el calentamiento, natural e inducido, se incrementa. El glaciar del Ródano es uno de los pocos cuya lengua se encuentra por debajo de esa cota, descendiendo hasta los 2.200 msnm.



De todos los glaciares de los Alpes, es el más accesible, y uno puede conducir prácticamente hasta la base. En el último millón de años, la Tierra ha pasado por cuatro edades de hielo, conocidas como Günz (600.000-530.000 años), Mindel (480.000 – 425.000 años), Riss (310.000 – 190.000 años) y Würm (150.000 – 15.000 años) nombres que pueden resultarnos extraños a quienes no estamos familiarizados con los ríos de Bavaria.


La mayor parte de Suiza estaba cubierta de hielo durante la última glaciación, mientras que la temperatura del centro de Europa era, en media, unos 15 grados centígrados inferior a la actual. En aquella época, el glaciar que nos ocupa era el mayor de Suiza, mientras que, en la actualidad, ese honor (en realidad es el mayor de la Europa continental) corresponde al Aletsch.

Las morrenas y las piedras “errantes” demasiado grandes como para ser transportadas por humanos son los verdaderos chivatos que nos cuentan cómo eran entonces estos ríos de hielo. La historia de los últimos 400 años está documentada por dibujos, pinturas, escritos y fotografías, mientras que las técnicas del carbono 14 también nos ayudan a medirlos. Si nos fijamos bien, las rocas muestran el paso de un glaciar que ha ido puliéndolas a lo largo de los siglos y milenios.



Las primeras mediciones fiables las llevó a cabo Henri Besson en 1777. Otras tuvieron lugar en 1826 y 1834. Por lo visto, comenzó a fundirse con rapidez, de modo que 1870, en un periodo de 100 años, había retrocedido unos 325 metros. Desde esa fecha, las mediciones son anuales.

Después de pagar la entrada hay que recorrer algunos metros, descendiendo por unas escaleras hasta llegar al túnel que han excavado en el propio hielo. Es la mayor atracción del sitio, y nos divierte verlo desde dentro, pero la tela con la que han cubierto la lengua del glaciar para ralentizar su deshielo da una impresión penosa, siendo una muestra más de la fragilidad de este paisaje. Nos adentramos en el túnel y agradecemos la pasarela de madera, que nos ayuda a caminar sin resbalar.




Nos acercamos a este otro mirador, desde el que apreciamos el valle No hace tanto tiempo estaba cubierto de hielo y es aquí donde mejor se aprecia el enorme retroceso del glaciar.


Si bien nuestro planeta se ha calentado y enfriado sucesivamente a lo largo de los milenios, estamos en un punto de no retorno. Los glaciares nos avisan, pero la humanidad hace oídos sordos, y dentro de muy poco será demasiado tarde para revertir el calentamiento global.



Como siempre, el futuro depende de cada uno de nosotros. Son decisiones que no podemos dejar en manos de políticos ineptos.

14 comentarios:

Senior Citizen dijo...

En Sierra Nevada, de los glaciares solo quedan las huellas, incluso en la llamada "cuerda de los tresmiles", una serie de picos que sobrepasan los 3.000. No hace tantos años que, en verano, desde la ciudad se veía la sierra con restos de nieve, pero ahora ya no se ve nada blanco en cuanto entra Julio.

unjubilado dijo...

¡Que maravilla, viajando en coche hasta el mismo glaciar y no he tenido que poner cadenas en mi auto! Pero al final me he puesto los crampones, por si acaso ya que no me he fiado de las maderas, que en ocasiones estando húmedas resbalan.

Mari-Pi-R dijo...

Me maravillan siempre tus viajes por tu pasión a la naturaleza, yo soy de ciudades, aunque ya poco hago actualmente.
Un abrazo.

Chok dijo...

muy chulas. Eres un artista.

RosaMaría dijo...

Qué fotos hermosas! Esa lengua del Glaciar me recuerda al Perito Moreno y mi paseo caminando sobre él, así que me parece apasionante recorrerlo por dentro como hiciste. Una gran experiencia tu paseo. Gracias. Beso

Una mirada... dijo...

Impresionante. Es una crónica pétrea del planeta, de sus diferentes estadios y variaciones; quizás, el último canto de sirenas heladas cuyos gemidos se sienten en el corazón y claman a la vista.

Ela dijo...

As always, your posts and photos are very interesting!
Greetings

lola dijo...

Hola Javier, creo que me daría un poco de claustrofobia pasear por ese túnel. Prefiero los espacios abiertos. De todos modos, se ve que ha sido una experiencia muy interesante.
Saludos,

Tawaki dijo...

Senior Citizen, el retroceso es más que evidente, y se está dando en casi todo el mundo. Nos espera un futuro la mar de complicado y no estamos haciendo casi nada por evitarlo.

Un jubilado, en Suiza fallan pocas cosas. Si algo caracteriza a este país es la accesibilidad a unas montañas que imponen pero que se pueden visitar hasta en silla de ruedas.

Chok, un gusto verte por aquí, amigo. Me alegro de que te gusten.

Rosa María, el Perito Moreno son palabras mayores. Hace más de diez años que estuve por allí y aún recuerdo la caminata con los crampones. Espectacular.

Muchas gracias a todos por vuestros comentarios.

Tawaki dijo...

Mari Pi-R, me consta, pero es que en Suiza los paisajes naturales me llaman más. Las ciudades no son feas, pero no tienen tanto encanto.

Una mirada, muy bien expresado. Es como un libro que nos habla de historias pasadas pero que nos va mostrando el índice que suele ir al final. De nosotros depende que haya más volúmenes.

Ela, glad you like it. It was a very nice trip, a good way to spend a day in Switzerland.

Lola, apenas se adentra uno unos pocos metros, así que no da sensación de claustrofobia, y el lugar bien merece una visita.

Muchas gracias a todos por vuestros comentarios.

ANNA dijo...

Gracias por tu visita y aportacion.

Me ha encantado tu entrda
Besos

Tawaki dijo...

Anna, ¿eres quien creo que eres? En cuanto tenga un rato me paso por tu blog. Espero que vaya todo perfectamente.

El Guisante Verde Project dijo...

Los glaciares son un ejemplo perfecto de hacia donde nos dirigimos como especie... Una visita muy interesante, que nos quedó fuera de nuestro recorrido en Suiza y ahora me da pena. ¡Otra vez será!
Saludos!

Tawaki dijo...

El Guisante verde Project, Suiza está llena de rincones interesantes, pero hay tantos que muchos solo se pueden disfrutar si vives allí. Seguro que visteis muchas otras cosas en vuestro viaje. Es imposible abarcarlo todo. Por desgracia, los glaciares llevan tiempo avisándonos, pero nadie les hace caso.