sábado, 12 de octubre de 2013

Zugerberg

Es el primer sábado de agosto y me debato entre rendirme a la pereza y marchar a leer al lago o irme de excursión a Zugerberg, un monte que tengo a tiro de piedra. En estos casos es mejor no pensar, coger la mochila y las botas y salir andando.

Sé que el autobús 11 me llevará hasta el pie del funicular que me ahorrará toda la subida y por el camino voy ensayando la frase para comprar el billete en alemán. El problema es que no estaba preparado para la pregunta del conductor. Luego lo entendí, resulta que te venden el billete del funicular en el autobús. Estos suizos son tan organizados…



Como de costumbre, no he mirado nada, no llevo ni guía ni mapa y no tengo ni idea de para dónde tirar, así que sigo por el camino más empinado pensando en que será mejor subir al principio, mientras esté descansado, y que ya habrá tiempo para bajar.

Nada más empezar y ya tengo estas vistas del lago.




Esto de aquí es Zug, y yo vivo donde más se adentra el lago en la pare derecha.


Procuro memorizar por dónde voy para no perderme a la vuelta. El camino es llano y apto para todos los públicos, como a mí me gusta, con suaves praderas entre granja y granja.





De vez en cuando atravieso algún pequeño bosque. La altitud no es grande y el calor empieza a apretar, así que se agradece la sombra.




En esta granja tienen este ingenioso sistema para que las vacas se rasquen.


Y con tanta señal es imposible perderse.


Llegados a este punto me asalta la duda. ¿Regreso a Zug por donde he venido o sigo hasta Oberwil por un camino desconocido? Nos vamos a Oberwil, que no se diga.



Una parada para comprobar dónde estoy (más o menos) y alguien que va más despacio que yo.



Después de un par de horas de bajada diviso las primeras casas de Oberwil. Ya sólo me faltan 3 km para llegar a casa.



11 comentarios:

Ligia dijo...

Qué maravilla de paisajes!! Buena caminata la que hiciste y además arriesgada. Me es muy difícil caminar por lugares desconocidos y si vas solo, menos. Abrazos

nella dijo...

Coincido con Ligia, maravilla de lugar. Cúanto caminaste? se me hace que fue un largo recorrido. Lo que me encantó fue el dispositivo para que las vacas se rasquen, quizá debiéramos implementarlo para nosotros jajajjaaa
beso

José Núñez de Cela dijo...

Menos mal que elegiste el monte! :)
Después ùedes quedarte a leer un rato.

Saludos!

Contadora de Libros. dijo...

¡Anda, qué valiente!

Me ha encantado este paseo, ¡vaya vistas!!!!.

En total, entre subida y bajada más el cambio de planes (ruta)....¿cuánto tiempo caminaste?

Una buena decisión tomaste ese día de Agosto, te agradezco que la compartieras porque la he disfrutado mucho.

Y me gustó el humor con que se relata.

Un abrazo.
Neli.

Contadora de Libros. dijo...
Este comentario ha sido eliminado por el autor.
unjubilado dijo...

Preciosos paisajes, yo últimamente ando bastante rápido, con decirte que gano a ese que lleva la casa a cuestas...
Claro que si me pierdo llevo un móvil de antes de la guerra, se llama móvil ya que cuando me muevo se mueve conmigo, pero no sirve nada más que para llamar y ser llamado y si no tengo cobertura, que es lo normal en el fondo de un valle o barranco, tengo que echar mano de la hoja que he imprimido para saber por donde se vuelve, ya que ni gritando me oye nadie, eso si, comunico a mi mujer por donde voy a ir, no vaya a ser que tengan que subir a buscarme por un desfallecimiento, por haberme olvidado del bocata.

unjubilado dijo...

Se me olvidaba, últimamente no tengo miedo a los grandes paseos, a las cuestas empinadas ni siquiera a perderme, ya que tengo una memoria fotográfica y logro recordar todos los sitios, aunque sea a vista de pájaro.

Teté M. Jorge dijo...

Um passeio precioso e cheio de detalhes agradáveis! Valeu deixar a preguiça de lado...

Beijos.

Blau dijo...

Eres un aventurero. Viva Tawaaa! aprende bien los caminos para llevarmeeee jajajaja

Tawaki dijo...

Ligia, bueno, sabiendo dónde estaba el lago había poco peligro de perderme. El paisaje sí que mereció la pena.

Nélida, unas cuantas horas, porque pasara a hacer fotos y a leer. Iba sin rumbo fijo, disfrutando del día.

José Núñez, la pereza es una gran enemiga. Hay que vencerla siempre que se pueda.

Nélida, bueno, perderse tan cerca de casa no es tan fácil, je,je. Creo que fueron unas cinco o seis horas, pero haciendo muchas paradas. En cuanto al humor, que no falte nunca.

Muchas gracias a todos por vuestros comentarios.

Tawaki dijo...

Un jubilado, ya veo que te cansas poco y que lo visitas todo. Así da gusto. Yo también prefiero los móviles simples, pero ya que tengo que sufrir la blackberry por el trabajo, al menos que me sirva de algo.

Teca, sí, tengo mucha suerte al vivir cerca de estos paisajes tan bonitos.

Blau, pero no me ibas a guiar tú?? Ja,ja.

Muchas gracias a todos por vuestros comentarios.