En abril de 2021, aprovechando un fin de semana soleado como pocos, decidí explorar alguna de las muchas zonas de Suiza que aún me quedaban por visitar. Me acerqué, en esta ocasión a la parte francesa de la Confederación, a Yverdon – les – Baines.
Clendy es el yacimiento megalítico más importante de Suiza. Lo encontramos a orillas del lago Neuchâtel y está formado por 45 piedras de muy diferentes tamaños que fueron erigidas por nuestros antepasados hace más de 6.000 años. Algunas alcanzan los 4,5 metros de alto y las 5 toneladas de peso.
Son rocas alpinas que fueron arrastradas por el glaciar del Ródano, y estuvieron cubiertas por el agua hasta que unas obras para corregir el nivel y canalizar el Jura (1869-1883) las dejó al descubierto. En 1896, el ingeniero Charles de Sinner publicó una descripción del sitio.
Alrededor del 850 a.C. se derrumbaron como consecuencia de la erosión, siendo reconstruidas en 1986. Los menhires están alineados en dos líneas de unos 50 metros, formando un arco de cuatro grupos, y algunas tienen forma humanoide.
Erigidas por los habitantes neolíticos de las poblaciones lacustres de la región, han visto el paso de los milenios y el cambio del nivel del agua, ajenas a los humanos que las construyeron.
Algunas de las más pequeñas, de unos 35 cm, son copias de hormigón, ya que las originales se encuentran en el museo de Yverdon – les – Baines.
10 comentarios:
¿Cuando se reconstruyeron se pudieron colocar en los mismos sitios o se había perdido el rastro?
Todo un museo histórico al aire libre en el que se hace realidad aquello de "Si las piedras hablaran...". Transmiten las fotografías la sensación de tranquilidad, como si el entorno velara el sueño milenario de los antepasados que dejaron su huella en esos monumentos megalíticos.
Y cada vez que paso por tu espacio me entran unas ganas inmensas de saldar esta deuda, mi viaje a Suiza, ese viaje a la tierra donde emigraron mis ancestros y en el que siguieron viviendo a día de hoy muchos de ellos. Qué ganas de conocer Suiza. Mi abrazotedecisivo
Senior Citizen, buena pregunta para la que no tengo respuesta. Sospecho que no fueron muy lejos de donde cayeran, pero también que las levantaron como pudieron.
Una mirada, para muchos solo son piedras, pero a mí me emociona pensar que las levantaron personas como nosotros hace tanto tiempo.
Sara, ya estás tardando, ja,ja. Seguro que ibas a descubrir muchos lugares preciosos.
Muchas gracias a todos por vuestros comentarios.
El gran enigma es elpropósito de este trabaja tan grande.
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En otro orden. Quedé encantado con tu entrada del museo de la Mercedes. Vengo de allá
Alí Reyes, y que lo digas. Este tipo de monumentos siempre trae más preguntas que respuestas, y quizás por ello tienen más encanto. Yo soy un enamorado de las "piedras" Abrazo fuerte.
Semejantes pedruscos tendrían originalmente alguna utilidad, quizás ¿la separación de los lindes de parcelas? o ¿diversas épocas delimitadoras de cambios climáticos? Lo cierto es que inicialmente alguna razón les llevó a colocarlos en sus sitios originales independientemente de que posteriormente fueran removidos e incluso se le llegara a dar formas humanas.
Un jubilado, nadie sabe por qué fueron erigidos. Es un misterio que en mi modesta opinión, nunca podremos resolver. Viendo lo alineados y juntos que estaban, lo más lógico es pensar que señalaban el momento de las cosechas a modo de calendario, pero es una de tantas elucubraciones. Un abrazo.
Hola Javier! Siempre sorprendiendo al mostrar las bellezas de toda clase de Suiza. Tengo una debilidad por los menhires. No sé por qué, pero me atraen mucho. Hermoso lugar!! Gracias por mostrarlos!
Silvia E. Duraczek, me encantan este tipo de piedras, y si tengo la oportunidad de verlas no me lo pierdo. Transmiten muchas dudas y casi ninguna certeza, pero saber que llevan así un buen puñado de siglos impresiona a cualquiera. Un abrazo.
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