Esta entrada es una continuación de la anterior, en la que os mostré el pueblecito donde Audrey Hepburn pasó sus últimos años. Era la 53 edición de la feria de los tulipanes en Morges, un pueblo cercano, y no quería perdérmela.
Había empezado más de un mes antes, y las flores no estaban en su mejor momento, pero me entretuve sacando fotos que ahora os toca sufrir. La cantidad de variedades es increíble.
A veces la vida tiene coincidencias crueles. Audrey, que sufrió los rigores de la Segunda Guerra Mundial, pasó mucha hambre, y se vio obligada a comer bulbos de tulipán que le causarían varios problemas de salud durante el resto de su vida.
Ya retirada del cine, volvería a enfrentar el hambre, esta vez con mejores armas, colaborando con UNICEF. En sus últimos cinco años realizó más de cincuenta viajes a Sudán, El Salvador, Vietnam, Etiopía y Somalia.
La actriz de Vacaciones en Roma, Sabrina, Desayuno con diamantes, Charada, o My Fair Lady entre otras muchas cintas icónicas, encontró en Suiza la tranquilidad necesaria para criar a sus dos hijos lejos de los focos de Hollywood. Vestida por Givenchi, era el sumun de la elegancia, y hablaba cinco idiomas, pero su vida distó mucho de ser completamente feliz.
La relación entre ella y los tulipanes de Morges es meramente accidental, pero me ha parecido una buena forma de homenajearla y de darle las gracias, pues somos muchos los que, como Jack Warner, pensamos que era una mujer entre un millón.
Me asomé a un lago Lemán sin viento en el que procrastinaban los veleros, almorcé algo por allí cerca, y me subí al tren de vuelta a casa. Luego dicen que en Suiza se aburre uno mucho.
8 comentarios:
Si eso es aburrirse, sería bueno hacerlo más a menudo...risas.
Bellísimas esas flores y yo lo tomo como un homenaje a AH. Gracias por esas fotos.
Ah... y gracias por tu comentario en LA PROPIEDAD, te confieso que estaba esperando tu reacción a ese texto. Esta semana espero estar respondiendo los comentarios, de todas maneras y de nuevo, GRACIAS
¡Que preciosidad de tulipanes! Y que bien hiciste en no perdértelos, pues gracias a eso los vemos nosotros.
Cuando estuve en Ámsterdam no era época de tulipanes, pero vi muchos de cerámica, y mi mujer se trajo unos cuantos entonces me enteré de la famosa "crisis de los tulipanes", donde por el precio de un tulipán, se podía comprar una casa. Se le considera la primera burbuja económica de la historia.
Tus fotos preciosas.
Qué variedad tan maravillosa de tulipanes! Hermoso homenaje a Audrey. Y si, ese dicho que Suiza es aburrida salio de estas tierras....aqui no estamos aburridos sino castigados por todo lo que pasa, ya no sabemos de donde vendrá el proximo golpe. Gracias por mostrarnos tanta belleza de tu pais adoptivo!! Abrazo!
Alí Reyes, es que alguna gente comenta que Suiza es aburrida, y yo discrepo totalmente. Has acertado, la entrada delos tulipanes complementa la de Audrey a modo de homenaje. ¡Sigue escribiendo!
Senior Citizen, y eso que llegué tarde, cuando ya llevaban semanas plantados, pero aún así lucían preciosos. Espero volver por allí este año.
Un jubilado, esa crisis la hemos estudiado todos los que nos dedicamos a las finanzas. No fue ninguna nimiedad, te lo aseguro. Estuve haciendo tránsito en Ámsterdam hace poco y me parece que ya va siendo hora de que vuelva a esa preciosa ciudad.
Silvia E. Duraczek, creo que tuve suerte al elegir ese momento y hacer que coincidieran. No conozco de cerca a vuestro nuevo presidente, pero ya sabes que me considero un liberal con límites (está en mi descripción desde que empecé el blog). Sinceramente, espero que los argentinos salgáis adelante; son ya demasiadas décadas de continuas crisis.
Muchas gracias a todos por vuestros comentarios
Qué relax produce pasear entre esos atrayentes colores. Dejar la mente en blanco y limitarse a observar. Una gozada.
Una mirada, la feria volverá dentro de unas semanas, y ya tengo apuntado en la agenda una visita. No es solo por los tulipanes, el pueblo tiene un castillo interesante y las vistas del lago son siempre un lujo. Quizás le haga otra visita a Audrey...
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